A la voz de puto el que no cante...

Que el Chaman salve a México!

Y vaya que nos salvo, al menos por 4 horas del aburrimiento.

El concierto empieza con una limpia y un show de la tribu, después pasamos al un almanaque de desgracias y eventos musicalizados. Desde la explosión en Sn. Juanico hasta Juanito e Iztapalapa, pasando por Bush y su zapatazo, Fox y Martita, el pendejo del M. Balderas, el boliviano imbécil que secuestro un avión con 2 latas de jugo, la guardería ABC, entre otras cómo ¿Mamá que es lo que quiere el negro? (la casa BLANCA) si, también le cayo la justicia del Tri a Obama y al "gordito" de Hacienda. 

Hubo alguna que otra canción proselitista, mentadas de madre, entregas de premios, anuncios del PRI, mentadas de madre a partidos políticos, alguno que otro anuncio descarado, mentadas de madre, canciones viejas con alguna mentada de madre en medio, una canción arruinada por el enano de Armando Manzanero (lastima wey, arruinaste pobre soñador eres un tarado) y unas cuantas más mentadas de madre. Después de ver llorar a la Chela, escuchar sus gritos y decirnos (entre sollozos claro está): "cuando se muera su madre ya no hay pa' atrás cabrones, díganle que la quieren" que se vienen los clásicos y un minuto de desmadre para la madre de la Señora Chela que Dios guarde en su gloria.

Entre aplausos, gritos y mentadas de madre tocaron una buena dosis de buen rock an' rooooool. Esperadas canciones como la Nostalgia, Triste Canción, Niño sin Amor y cerrar con las Piedras Rodantes sin dejar pasar a María Sabina y su sabiduría. Mucha fue mi felicidad al escucharlas y me dejaron con buen sabor de boca, música y diversión por parte de el wey mas corriente que ha pisado la Tierra.

Fue bueno ver el concierto con la pura banda, arriba en el auditorio que casi lleno estaba. No podría dejar pasar la ocasión para reírme una vez más de el petardo que teníamos delante. JAJAJAJA pobre diablo, se llevo parte de mis aplausos (no solo de los míos creo yo) por su falta de coordinación motriz y su gran emoción. Esas cosas pasan cuando con ganas de ahorrar dinero te vas a un concierto pal pueblo en lugares baras, y si que estuvo divertido ver al limpiadores descompuestos llevar el ritmo con brazos arriba y ni que decir de sus aplausos tan a destiempo que parecía estar en algún otro concierto muy ajeno al dado por Don Alejando Lora y su banda de malandrines.